Call of Duty: Modern Warfare 2 se acerca peligrosamente al momento de su lanzamiento, y con éste tendremos entre nosotros al que es probablemente el videojuego más esperado del año. Nos acercamos a la campaña individual de lo nuevo de Infinity Ward; y no nos olvidamos tampoco del multijugador, la verdadera esencia del videojuego.
Las palabras Call of Duty se han convertido en sinónimo de arcades bélicos que sustituyen la falta de realismo de su premisa, por una intensidad y espectacularidad cinematográfica fuera de toda duda. Una saga que tiene la calidad por bandera, y que ha conquistado el corazón de millones de jugadores de todo el mundo que ansían su llegada a principios del mes de noviembre.
En el que será el último avance antes del lanzamiento de Modern Warfare 2, salvo sorpresa de ultimísima hora, abordaremos las últimas informaciones que se conocen de campaña individual y multijugador: Los dos pilares fundamentales que hacen de la experiencia Call of Duty la más intensa de las que ofrecen cuantos shooters bélicos se pueden disfrutar en la actualidad.
En Nombre de Caín –Campaña Individual- Breve pero intenso. Así es como se puede definir el Modo Historia de los Call of Duty de Infinity Ward. Si bien los capítulos desarrollados por Treyarch son algo más largos pero también más irregulares en este sentido –Call of Duty 3 o Call of Duty: World at War, lo demuestran-, lo cierto es que los del estudio británico son algo más breves en duración, pero netamente más interesantes en cuanto a calidad y propuesta vibrante y única.
Los Estados Unidos amenazados. La saga Call of Duty tiene por vez primera a Norteamérica como escenario de la acción con Modern Warfare 2.
En Modern Warfare 2 seremos Gary Sanderson que formará parte de un equipo de operaciones especiales con unidades británicas y norteamericanas como ya adelantamos en su momento, sin embargo los detalles de su misión y su relación con sus compañeros siguen guardándose en el más absoluto de los secretos, puesto que desde su estudio de desarrollo se desea conseguir el siempre ansiado factor sorpresa.
Lo que sí sabemos positivamente es que el videojuego tiene lugar en muchos lugares del mundo, tratando de ofrecer un retrato menos focalizado que la anterior entrega, el primer Modern Warfare. Entre las intenciones de Infinity Ward estaba la de llevar la guerra a un lugar mucho más cercano para el jugador, y si bien los Estados Unidos a los ciudadanos españoles nos quedan algo lejos, lo cierto es que haciéndoles luchar en su propia tierra tocarán la fibra sensible a millones de usuarios norteamericanos.
La presencia de escenarios muy poco frecuentes en un shooter bélico es uno de los grandes atractivos del título. Recorreremos el mundo y visitaremos muchas instalaciones y edificios civiles.
En el estudio están realmente ilusionados con el factor de que el videojuego es una secuela directa en términos argumentales con respecto a su predecesor, lo que les va a permitir explorar líneas y nexos de unión entre uno y otro lanzamiento como en el pasado no pudieron hacer. Los personajes, buenos y malos, ya están creados, y algunas de las intrigas que veremos en este nuevo episodio ya se vieron en su momento. Ese fue precisamente el motivo del intento de Infinity Ward de retirar las palabras Call of Duty del título de Modern Warfare 2, conato de maniobra que fue rápidamente aplacado por parte de Activision debido al lastre comercial que podría suponer para las series.
Guerra en la Red -Multijugador- Sin embargo, y por mucha dedicación que sin lugar a dudas ponen los chicos de Infinity Ward en la campaña individual, lo cierto es que ésta se acaba, generalmente más pronto que tarde, y lo que queda para prolongar la vida útil del videojuego es su poderoso multijugador.
Hasta Call of Duty 4 el on-line de las entregas anteriores de las series estaba ahí y hacía un extraordinario trabajo, pero nunca contó con el gancho del que sí disfrutaba el primer Modern Warfare. Los astros se alinearon con ese capítulo y se consolidó una experiencia que era tan brillante en su propia faceta jugable como profunda en cuanto a personalización, progresión y posibilidades.
Intensidad en la campaña e intensidad también en el multijugador. Modern Warfare 2 nos recuerda que los Call of Duty pares siempre son los mejores.
Con la sexta entrega de la franquicia la línea es similar a la comenzada hace ya dos años, aunque se explota con nuevas líneas y facetas que explorar. Cuando el usuario ponga sus manos sobre Modern Warfare 2 encontrará lo que esperaba y lo que seguramente también desee, una experiencia virtualmente idéntica a la de su predecesor indirecto pero suficientemente perfeccionada y pulida como para rescatar de nuevo su atención.
Las partidas aquí se dividirán en dos equipos de nueve contra nueve, con la habitual mixtura de niveles de interiores y exteriores que tan bien ha funcionado en el anterior videojuego. En este nuevo capítulo, sin embargo, se observa mayor variedad en los escenarios, y un mayor énfasis por la verticalidad de los entornos, lo que se acaba traduciendo en una jugabilidad con mucha mayor diversidad, y una experiencia on-line en la que deberemos vigilar cada rincón del escenario.
